La aerolínea neerlandesa KLM desperdicia menos alimentos a bordo de sus aviones trabajando con inteligencia artificial. Los programas de IA permiten a la empresa predecir mejor cuántos pasajeros que han realizado una reserva se incorporarán realmente a un vuelo. Esto permite calcular el número de comidas necesarias, lo que se traduce en una reducción de hasta un 63% el desperdicio de alimentos. Esto supone un ahorro anual de más de 100.000 kilos de comida.
“La inversión en tecnología digital es una punta de lanza para KLM. La aplicación de la inteligencia artificial contribuye enormemente a mejorar y hacer más sostenibles nuestras operaciones de vuelo. La lucha contra el desperdicio de alimentos es un gran ejemplo de ello, que se traduce en decenas de miles de comidas menos desperdiciadas en nuestros vuelos cada año”, dijo Marjan Rintel, ceo de KLM.
No todas las reservas realizadas dan lugar a que un pasajero embarque en un avión de KLM. Dependiendo de la clase, entre el 3% y el 5% de los pasajeros con reserva no se presentan (a tiempo) al vuelo.
El último modelo de IA (TRAYS) es el primero desarrollado específicamente para las operaciones de catering de KLM. Este predice el número de pasajeros a bordo basándose en datos históricos. El sistema de comidas (Meals On Board System, MOBS) recibe el número previsto de pasajeros por vuelo con previsiones separadas para las clases Business, Premium Comfort y Economy. La predicción mediante el modelo de IA comienza 17 días antes de la salida del vuelo y continúa hasta 20 minutos, de modo que para todo el proceso de catering, desde la adquisición hasta la carga, se predice con la mayor exactitud el número de pasajeros, evitando así el exceso de comidas.
El modelo TRAYS AI se lanzó a finales del año pasado desde Kickstart AI. En él se reunieron talentos de empresas como KLM, bol, Ahold Delhaize, NS e ING, para trabajar en su desarrollo.
Un análisis de tres meses muestra que se desperdicia un 63% menos de comida en comparación con el catering por cada pasajero reservado. La mayor mejora se observa en los vuelos intercontinentales de KLM desde el aeropuerto de Schiphol, donde se tiran 2,5 (1,3 kilogramos) menos comidas por vuelo. Sobre una base anual, esto representa un ahorro de 111.000 kilogramos de comidas en todos los vuelos de la aerolínea atendidos desde Schiphol.
KLM también está trabajando en la aplicación de la inteligencia artificial en otras áreas de sus operaciones. Por ejemplo, la IA es importante para hacer más inteligente el mantenimiento de los aviones. Además, se utilizan programas de IA para simular los días de mal tiempo previstos, dejando claro de antemano cuál es el mejor horario para trabajar con el fin de mantener los vuelos en marcha en la medida de lo posible. La inteligencia artificial también ayuda a los clientes ofreciéndoles consejos de viaje personalizados después de reservar un vuelo.
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