Una columna de opinión publicada en The Wall Street Journal desperó nuevamente la polémica en relación a la inteligencia artificial (IA) y su impacto sobre los empleos “de cuello blanco” (profesionales de nivel medio o directivos). Su autor, Ray A. Smith plantea, tras analizar diversas industrias, que podría resultar que muchos roles gerenciales desaparezcan para siempre: “La IA generativa no sólo acelera tareas rutinarias o hace predicciones reconociendo patrones en los datos. Tiene el poder de crear contenido y sintetizar ideas: en esencia, el tipo de trabajo de conocimiento que millones de personas hacen ahora detrás de computadoras” concluye Smith.
Como viene ocurriendo a menudo desde la masificación de las inteligencias artificiales desde hace poco más de un año, cada vez que un referente o un medio importante realiza un vaticinio apocalíptico sobre IA y empleabilidad, emerge nuevamente la psicosis y la resistencia a este avance en la tecnología. Esto es un error principalmente por cuatro razones:
- 1° La IA va a eliminar empleos pero creará nuevos: No hay que ser ingenuos. Como todo avance tecnológico, uno de los propósitos de la IA es optimizar las labores humanas. Algunos oficios que conocemos actualmente podrían desaparecer o modificarse sustancialmente; pero también surgirán nuevas profesiones. Si no nos adaptamos a los cambios, nuestros empleos si corren peligro, por ello es preciso actualizarse y capacitarse. Y, en este sentido, los gobiernos tienen una responsabilidad muy importante: desde generar un mindset basado en la evolución y adaptación al cambio desde las bases del sistema educativo hasta las políticas de capacitación direccionadas a adultos mayores y personas de mediana edad; además de fomentar la inserción laboral en todos los niveles.
- 2° La IA existe hace más de 80 años: Siempre ha estado en evolución permanente, pero su aplicación siempre estuvo reservada al sector privado. Hace décadas que empresas como Santex desarrollan soluciones basadas en IA para otras empresas y gobiernos, las cuáles seguramente tuvieron un impacto en las fuentes de empleo, pero que pocos advirtieron.
- 3° Las habilidades diferenciales de los humanos no pueden ser reemplazadas por AI: El informe “Global Risk Report 2024” elaborado por el Foro Económico Mundial, resaltó varias competencias interpersonales como las más demandadas y, en consecuencia, las que permiten a quienes las poseen obtener mayores ingresos. El principal aprendizaje del estudio es que habilidades humanas como el pensamiento estratégico, capacidad de negociación, de persuasión, de presentación, pensamiento crítico, innovación, resiliencia y la inteligencia emocional no pueden ser emulados por la IA.
- 4° En el siglo XXI las empresas, además de hacer negocios, buscan aportar valor social: Si bien hay excepciones, las corporaciones modernas se alejaron del estereotipo cinematográfico basado en los grandes campeones de la industria del siglo XIX. Las empresas de hoy saben que no pueden ser sustentables económicamente en sociedades pobres, por ello buscan integrarse armónicamente como un ecosistema, midiendo permanentemente que su impacto sea siempre positivo o al menos neutral. Y todo lo que refiere a IA no es una excepción. Este es el concepto de shared value que propone Michael Porter.
Como ocurre en todas las industrias modernas, la regulación busca adecuarse a lo que ya está pasando y el compromiso ético de las empresas toma un rol sustancial en esta materia. En este punto, la ética empresarial se posiciona como un factor crítico. Y es muy importante la voz de los referentes en cada temática para guiar esta conversación. Desde Santex, por ejemplo, promueven la formación de Liga del Bien de la IA, un movimiento formado por un equipo interdisciplinario de especialistas de la academia, el sector privado y el tercer sector, que busca apoyar el debate ético y la difusión de ideas para un desarrollo regulatorio acorde a valores humanos universales. Desde allí desarrollaron un documento de Autoevaluación en materia de IA, que propone compromisos éticos y establece un vocabulario compartido sobre valores fundamentales.
Acerca de Santex
Santex es una empresa tecnológica global, con 25 años de experiencia y presencia en 100 ciudades en 18 países de todo el mundo. Se especializa en el desarrollo de software a medida, implementando soluciones basadas en Inteligencia Artificial, con el objetivo de aprovechar la tecnología para mejorar los procesos, automatizar tareas y marcar una diferencia competitiva. Tiene expertise en diversas industrias, como alimentos y bebidas, salud, banca, tecnología, manufactura retail y demás.
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